El arrendamiento es una práctica económica que ha existido desde la antigüedad. En sus inicios, consistía principalmente en acuerdos para el uso de tierras y ganado a cambio de pagos periódicos. 

A lo largo del tiempo, ha evolucionado, expandiéndose a otros bienes y activos, como maquinaria y tecnología. 

En la era moderna, el arrendamiento ha jugado un papel crucial en la facilitación del acceso a equipos costosos sin grandes desembolsos iniciales, brindando ventajas financieras y fiscales que lo han convertido en una herramienta clave para las empresas.

Conclusión: El arrendamiento ha demostrado ser una estrategia financiera esencial para empresas que buscan adquirir bienes sin comprometer su capital. Hoy en día, representa una solución flexible y eficiente para la optimización de recursos en diversos sectores industriales, ayudando a las compañías a mantenerse competitivas sin realizar grandes inversiones iniciales.